La primera vez que vi un Hola Mundo fue en BASIC, siglas de Beginners’ All-purpose Symbolic Instruction Code (en español: ‘Código simbólico de instrucciones de propósito general para principiantes’), despues de varias lineas de codigo ( 1 linea que se redactava PRINT ¨Hola Mundo¨ ) obtenias una pantalla negra con un texto desplegado, y ohh wow en ese momento te sentias el hacker mas grande del mundo. Para ese tiempo la informacion no era tan difundida, teniamos libros o algun maestro que nos enseñaba la “sintaxis” pero en la gran mayoria de los casos era a prueba y error.
Mas adelante ya inmerso en el mundo laboral me volvi a topar con BASIC como lenguaje de programacion secundario en MicroStation, con este podiamos automatizar tareas engorrosas, modificar los menus y correr pequeñas rutinas, el gran problema surgio cuando se tuvo la necesidad que la “app” guardara informacion o ejecutara dos tareas a la vez, o se mantuviera alerta ante algun cambio o evento por parte del usuario, BASIC funcionaba de manera lineal ejecuntado tareas una a una; habiamos topado la usabilidad del lenguaje el cual nos mostro el camino para migrar a algo mas complejo como C++.
¡Hola mundo! La frase que todos los programadores han utilizado alguna vez al inicio de su carrera. Pero, ¿de dónde viene esta tradición?
El origen de esta tradición se remonta a los primeros lenguajes de programación, en particular al lenguaje C, donde la primera línea de código que se escribía era “printf(“Hola mundo!”);”, que básicamente imprimía la frase “Hola mundo!” en la pantalla. Desde entonces, la frase se ha utilizado como una forma de probar que el programa se está ejecutando correctamente.
A pesar de que puede parecer un detalle sin importancia, incluir esta línea de código en los programas es una práctica común en el mundo de la programación. Es una forma rápida y sencilla de verificar que el entorno de desarrollo está funcionando correctamente y que el programador ha escrito el código correctamente.
Además, la tradición de usar “Hola mundo!” también ha sido adoptada por los programadores como una forma de conectarse con otros desarrolladores de todo el mundo. Al usar esta frase, se demuestra que se pertenece a la comunidad de programadores y que se comparten las mismas experiencias y desafíos.
En conclusión, “Hola mundo!” es una frase que ha sido adoptada por la comunidad de programadores y que se ha convertido en un símbolo de la programación en sí misma. Es una tradición que ha perdurado a lo largo del tiempo y que seguirá siendo parte de la historia de la programación en el futuro.